
REFUGIO CUEVA
Si en el lugar existen grutas o cuevas, éstas constituyen un magnífico refugio.
El primer paso es comprobar que en su interior no habitan criaturas peligrosas como osos, pumas , serpientes…
Se debe construir un muro en la entrada para protegernos del viento y de los animales, dejando una pequeña puerta para acceder. La parte alta del muro también debe dejarse una apertura para la evacuación del humo si encendemos una hoguera.
Si la cueva es profunda y existen corrientes de aire, se puede levantar un muro interno que bloquee el túnel y las corrientes.
También suele ser adecuado levantar un segundo muro a la entrada, algo adelantado al primero, para cubrir la puerta de modo que no entre el aire frío o la lluvia, además de resguardar la puerta.
